La Voluntad de Dios Para Tu Vida
lunes, enero 30, 2012

La Voluntad de Dios Para Tu Vida

(2ª Reyes 20:1-6)

Introducción: Una de las cosas más imprescindibles para atinar en la vida del creyente es la voluntad de Dios en su vida. Es tan importante que nuestra salvación pende de ella (1ª Juan 2:17) "Y el mundo pasa, y su concupiscencia; pero el que hace la voluntad de Dios, permanece para siempre".

Cristo nos enseñó exactamente cómo orar para que sea realizada la voluntad de Dios para nuestras vidas en Mateo 6:10 "Venga tu reino. Hágase tu voluntad, así en la tierra como en el cielo". No dice, "Enséñame tu voluntad".

Hay muchos casos muy fascinantes en el Antiguo Testamento que nos enseñarán principios fundamentales para ayudarnos a someternos a la voluntad de Dios. Uno de los casos es nuestro texto principal en esta semana.

I.) Una proclamación de muerte:

A.) Ezequías era uno de los reyes justos sobre el reino de Judá. Isaías 37 cuenta una hazaña tremenda que hizo el Señor bajo su reinado a causa de fe en Jehová como el único Dios verdadero y sus clamores a Él.

1.) Pero cuando llegó la hora de su prueba personal, no quiso recibir la voluntad de Dios para su vida (Isaías 38:1-3).

2.) Cristo nos enseñó a entregar a nuestras propias voluntades para recibir todo lo que viniera – sea bueno o lo que no nos agrada - de la amorosa mano de Dios (Mateo 26:39) "Y yéndose un poco más adelante, se postró sobre su rostro, orando y diciendo: Padre mío, si fuere posible, pase de mí esta copa, pero no sea mi voluntad, sino la tuya".

B.) Todo lo que Dios desea para nosotros – Su voluntad – es para nuestro bien y es perfecto.

1.) Romanos 12:1-2, nos dice que Su voluntad es "… buena voluntad de Dios, agradable y perfecta". Pero la mente carnal NUNCA podrá entender la voluntad de Dios (Romanos 8:7) "Porque la mente carnal es enemistad contra Dios; porque no se sujeta a la ley de Dios, ni tampoco puede".

2.) Romanos 8:26-28, habla de que Su voluntad siempre obra para nuestro bien.

II.) Ezequías se angustia y, en un sentido, rechaza la voluntad de Dios y reclama al Señor por lo decretado.

A.) El rechazo de la voluntad de Dios indica la falta de confianza (fe) en el Señor. Es necesario confiar en el Señor y Su amor para con nosotros.

1.) Este rey justo llora y recuerda al Señor de su justicia.

B.) Dios sabe todo lo de nuestras vidas, pero también sabe todo lo que es mejor para nosotros y todos los que nos rodean.

1.) Él se angustia cuando sus hijos cruzan por el umbral entre la vida y la muerte; no porque teme el "misterio" de lo que está más allá, sino porque es una experiencia por nosotros (Salmos 116:15) "Estimada es a los ojos de Jehová la muerte de sus santos".

a.) Cristo no lloró porque Lázaro había muerto – Lázaro estaba con Abraham. Cristo lloró porque los que habían quedado atrás estaban acongojados (Juan 11:35) "Jesús lloró".

b.) Cuando Cristo resucitó, Él subió a la diestra del Padre y "se sentó"; pero cuando Esteban estaba agonizando, él vio a Cristo "en pie a la diestra de Dios" (Hechos 7:56).

III.) Dios no cambió Su decreto porque Ezequías tuvo una idea mejor, sino porque Ezequías rechazó Su voluntad. "Dios no es hombre, para que mienta; ni hijo de hombre para que se arrepienta: Él dijo, ¿y no hará? Habló, ¿y no lo ejecutará?" (Números 23:19).

A.) Cuando Dios decretó que era la hora propicia para que Ezequías pasara a Su presencia, estaba pensando, no solo en el bien de Ezequías, sino en las vidas de incontables personas del reino de Judá también.

1.) Al morir Ezequías, ya quince años después, reinó en su lugar Manasés; el rey más maligno que tuvo Judá (2ª Reyes 20:21-21:16).

B.) Os tengo que hace la pregunta ¿Qué edad tenía Manasés cuando tomó el trono?

1.) ¿Cuántos años después de la profecía de Isaías nació Manasés?

2.) ¿Por qué crees que Dios quería llevar a Ezequías a Su presencia cuando mandó a Isaías?

C.) El amor de Dios buscaba salvar al reino de Judá y en el proceso a miles de vidas.

Conclusión: ¡Dios nos ama y aunque no puedes entender su voluntad ahora, tenemos que confiar que su voluntad para nuestras vidas es PERFECTA y someter nuestras voluntades completamente a Él! Como Él dijo a Sus discípulos en Juan 13:7, "Lo que yo hago, tú no lo entiendes ahora; pero lo entenderás después".