La Resurrección del Cristo
(Marcos 16:1-18) (Romanos 4:25)
Introducción: Los cuatro evangelistas cuentan como todos los que vinieron con el testimonio de la resurrección fueron recibidos con incredulidad – que en si, es increíble.
I.) Todos los testimonios de las primeras apariencias son fascinantes. De hecho, Sus apariencias desde María Magdalena hasta Saulo de Tarso manifiestan la majestad, amor y atención personal de nuestro Señor hacía cada uno de nosotros.
A.) Marcos menciona a dos discípulos entre los primeros testigos en Marcos 16:9-13.
1.) Lucas también menciona estos dos discípulos en Lucas 24.
2.) Solamente sabemos el nombre de uno de ellos, Cleofas. Tanto Cleofas como su esposa eran fieles discípulos completamente dedicados para seguir al Señor (Lucas 24:18) (Juan 19:25).
B.) Cristo escogió una manera creativa y graciosa para revelarse a estos dos en Lucas 24.
1.) Mientras caminaban estaban hablando de Cristo y Cristo se manifestó en medio de ellos completamente conforme Su promesa (Lucas 24:13-15) (Mateo 18:20).
2.) De cómo no reconocieron a Cristo hasta el final del encuentro se puede explicar de varias maneras:
a.) Cristo pudo cambiar Su apariencia – no tuvo heridas o si quería manifestar algunas de Sus heridas pudo manifestarlas (Marcos 16:12) (Juan 20:27).
b.) Simplemente veló los ojos para que no le reconociera y quitaba el velo cuando quería que le reconociera.
C.) Cristo provocó más discusión con Sus preguntas. Parece que está jugando un poco con ellos (Lucas 24:17-19).
1.) Hay otra ocasión que Cristo jugó con Sus discípulos cuando ellos estaban [según ellos] en una situación muy seria (Marcos 6:48).
2.) En ambas situaciones puedo ver el Señor diciéndonos que si confiamos en Él, las situaciones que nos parecen tan horribles, en realidad son oportunidades para ver la obra de Dios.
3.) Cristo procedió a reprochar a Sus discípulos por no creer a Su Palabra escrita – toda la evidencia estaba en las profecías (Lucas 24:25-27).
4.) Nuevamente Cristo juega con ellos a hacer como le iba seguir de largo. Muchas veces Cristo pasa cerca de nuestras vidas y si no le paramos para invitarle a pasar y entrar con nosotros, sí, pasará de largo (Lucas 24:28-29).
D.) Estos dos discípulos reconocieron que su invitado era un gran maestro de la Palabra y un tremendo líder espiritual, y pidieron que bendijera la mesa con una oración (Lucas 24:30-32).
1.) Claramente nuestro Señor tenía una manera única de bendecir el pan que estos dos reconocieron inmediatamente. El momento que le reconocieron, Cristo desapareció de su vista.
2.) Aunque ellos no pudieron reconocer, físicamente a Cristo, el Espíritu de Dios estaba dando testimonio a sus corazones. Cristo dijo, "Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen;" (Juan 10:27).
E.) Cuando Cristo te habla y trata contigo, todo lo demás se empalidece en comparación de importancia.
1.) La mujer samaritana fue al pozo para sacar agua y volvió al pueblo corriendo – dejando atrás su cántaro que poco antes le era muy importante (Juan 4:28).
2.) Emaus dista once kilómetros de Jerusalén. Estos hombres anduvieron toda esta distancia para llegar a casa, solamente para dejar su comida y volver inmediatamente a Jerusalén para contar las buenas nuevas (Lucas 24:33).
3.) Cuando llegaron a Jerusalén, los hermanos contaron como el Señor había aparecido a Simón [Pedro] (Lucas 24:34).
a.) Esta apariencia a Simón es tan personal que ninguno de los evangelistas lo mencionan en detalle. Solamente se menciona aquí y en 1ª Corintios 15:5.
4.) Los dos de Emaus comenzaron a contar su experiencia con el resucitado Señor cuando Cristo mismo llegó para acabar con las dudas de todos (Lucas 24:35-36).
F.) Es imprescindible saber y creer que Cristo resucitó físicamente de los muertos. Su cuerpo literalmente volvió a la vida y todos los efectos de la muerte sobre Su cuerpo eran permanentemente reversados (Lucas 24:37-43).
1.) La Biblia llama a Jesucristo el primogénito de entre los muertos (Colosenses 1:18) (Apocalipsis 1:5).
2.) Cristo es el primogénito porque tal como Él resucitó, físicamente de los muertos, sin ningún efecto de la muerte sobre Su cuerpo; también resucitaremos de los muertos con un cuerpo completamente sano y glorificado.
3.) Cuando resucitamos de los muertos tendremos un cuerpo igual que el cuerpo resucitado de Jesucristo.
a.) Cualquier cosa que haya ocasionado nuestra muerte será quitado para siempre. No habrá más enfermedad, ni muerte (Apocalipsis 21:4).
Conclusión: Aún después de una inundación de testimonios estaban luchando con la incredulidad – hasta que Cristo apareció a todos y les reprendió por su incredulidad (Marcos 16:14).
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posted by Prince and Gina Parker @ 4/14/2010 11:52:00 a. m.,
