La Prosperidad del Alma
El Poder de la Paz
(3 Juan 2)
Introducción: La salvación y sanidad que Jesús ofrece afecta todo nuestro ser, físicamente, emocionalmente, mentalmente, espiritualmente. Pero la prosperidad del alma es la base de toda bendición permanente en las demás áreas de nuestra vida.
Hay tres fuentes de Prosperidad, os compartiré una hoy.
I.) La Primera Fuente de Prosperidad: Una vida de Fe - (Hebreos 11:6) “Y sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que El existe, y que es remunerador de los que le buscan.”
A.) Una mente que no esta atormentada ni ansiedad ni estrés, esta libre para declarar la sabiduría de Dios. El pecado trae la ansiedad: (Job 15:20-25) “Todos sus días el impío se retuerce de dolor, y contados están los años reservados para el tirano. (21) Ruidos de espanto hay en sus oídos, mientras está en paz, el destructor viene sobre él. (22) El no cree que volverá de las tinieblas, y que está destinado para la espada. (23) Vaga en busca de pan, diciendo: "¿Dónde está?" Sabe que es inminente el día de las tinieblas. (24) La ansiedad y la angustia lo aterran, lo dominan como rey dispuesto para el ataque; (25) porque él ha extendido su mano contra Dios, y se porta con soberbia contra el Todopoderoso.”
(1ª Pedro 5:7) “echando toda vuestra ansiedad sobre El, porque El tiene cuidado de vosotros.”.
1.) Cuando comenzamos a confesar la palabra de la mentira (el desanimo y falta de esperanza) damos lugar al enemigo de nuestras almas y ponemos por obra los poderes del maligno en nuestra contra, (2ª Timoteo 2:15-17) “Procura con diligencia presentarte a Dios aprobado, como obrero que no tiene de qué avergonzarse, que maneja con precisión la palabra de verdad. (16) Evita las palabrerías vacías y profanas, porque los dados a ellas, conducirán más y más a la impiedad, (17) y su palabra se extenderá como gangrena; entre los cuales están Himeneo y Fileto,”.
B.) Por medio de la fe podemos pensar y reaccionar de acuerdo a las Escrituras. El alma prospera puede aprovechar las ideas y las oportunidades de Dios. El nos llena de creatividad, estamos conectados a la fuente. (Marcos 11:12-14 y 11:20-23) “Al día siguiente, cuando salieron de Betania, Jesús tuvo hambre. (13) Y viendo de lejos una higuera con hojas, fue a ver si quizá pudiera hallar algo en ella; cuando llegó a ella, no encontró más que hojas, porque no era tiempo de higos. (14) Y Jesús, hablando a la higuera, le dijo: Nunca jamás coma nadie fruto de ti. Y sus discípulos le estaban escuchando... (20) Por la mañana, cuando pasaban, vieron la higuera seca desde las raíces. (21) Entonces Pedro, acordándose, le dijo: Rabí, mira, la higuera que maldijiste se ha secado. (22) Y Jesús respondió, diciéndoles: Tened fe en Dios. (23) En verdad os digo que cualquiera que diga a este monte: "Quítate y arrójate al mar", y no dude en su corazón, sino crea que lo que dice va a suceder, le será concedido.”.
1.) Cada vez que hablamos producimos fruto, y comeremos de ese fruto. La calidad del fruto determina la condición de nuestra vida. Cristo dijo: “De la abundancia del corazón habla la boca.” (Mateo 12:34)
C.) Salomón entendió este mismo principio al decir, “La vida y la muerte están en el poder de la lengua”. (Proverbios 18:21).
posted by Prince and Gina Parker @ 11/26/2006 02:53:00 p. m.,
