Creemos que Jesucristo es el Hijo de Dios, el único camino a Dios y salvador del mundo, nacido de la Virgen María, crucificado y resucitado y que vive hoy para dar nueva vida a todo aquel que cree en Él y confiesa Su nombre. Somos cristianos evangélicos y nos dedicamos a compartir el amor de Dios por medio de la enseñanza de La Palabra de Dios para alcanzar a la gente amada de Cáceres. (Una iglesia de la Federación Asambleas de Dios de España).


La Obra De Dios En Nuestra Vida

(2ª Corintios 7:1) “Así que, amados, puesto que tenemos tales promesas, limpiémonos de toda contaminación de carne y de espíritu, perfeccionando la santidad en el temor de Dios.

Introducción: Cuando Dios trata con nuestro ser, se produce limpieza y liberación de nuestra alma y también de nuestro espíritu.

Repaso: La semana pasada hablamos de tres agentes de limpieza de nuestras almas: (1) La sangre de Jesucristo. (2) La confesión de pecados. Una parte casi olvidado de la confesión de los pecados es la restitución. Cristo reconoció la restitución como parte del proceso con la confesión de Zaqueo: “…y si en algo he defraudado a alguno, se lo devuelvo cuadruplicado.” (Lucas 19:8). (3) Por la Palabra de Dios; Cuando escuchamos, leemos, meditamos y estudiamos la Palabra, ella nos libera, limpia, restaura es vida y Espíritu (Juan 15:3) (Efesios 5:26).

¿Por qué Debe Dios Tratar Con Nosotros?

I.) Porque el trato de Dios ministra a nuestra alma: El alma es el trono de los sentimientos, la voluntad, el intelecto y es el lugar de la personalidad del individuo. El diablo puede engañar y atrapar por medio de estos sentidos (1ª Juan 2:15-17).

A.) El ejemplo lo vemos en Lázaro (Juan 11:39-44); Jesús hizo lo imposible (resucitarlo), y delegó a sus discípulos lo posible: desatarlo de las manos (figura de las obras), de los pies (figura de su caminar); y de quitarle el sudario (desatar la mente, limpiar sus pensamientos, ojos, hablar, oír)

B.) Estas ataduras son formas de esclavitud de las cuales Cristo vino a librarnos. Estas ataduras son fortalezas para nuestro enemigo. Son progresivas y se pueden manifestar en varias formas (2ª Corintios 10:3-5).

1.) La opresión: Limitación o supresión de la libertad o los derechos de una persona, país, pueblo, etc., mediante la violencia o el abuso de autoridad. Puede ser causada por espíritus inmundos que manipulan los sentimientos, pensamientos y emociones, activando recuerdos, miedos y problemas pasados.

2.) La obsesión: Idea, deseo o preocupación que alguien no puede alejar de su mente. Puede ser por medio de ideas malas que impiden que la mente procese ideas buenas.

3.) La compulsión: Tendencia obsesiva a la repetición de determinadas acciones. El enemigo puede tener control de la mente, los sentimientos, la voluntad y produciendo alucinaciones o delirios (Deuteronomio 28:28).

4.) La posesión: Apoderamiento u ocupación del espíritu del hombre por otro espíritu.

Conclusión: La liberación de nuestras almas es un don de Dios proporcionado por medio de la sangre que Cristo derramó en la cruz del Calvario.

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posted by Prince and Gina Parker @ 8/23/2007 04:34:00 p. m.,

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